Una ruptura o separación sin duda alguna es un suceso que nos puede causar mucho dolor, sin embargo nuestra manera de afrontarla y vivirla hace la diferencia en el hecho de que esta nos pueda o no dejar marcas indelebles en nuestra memoria, si nos dejamos invadir por la tristeza este acontecimiento puede marcar rotundamente un antes y un después en nuestras vidas, y podremos estar perjudicando al mismo tiempo amistades y vínculos familiares.

Sin importar cual haya sido el motivo de la ruptura, es casi imposible que el cuerpo y la mente evadan esos sentimientos que nos inundan luego de una separación, es apenas normal experimentar una mezcla de emociones que logren afectar el desarrollo de nuestras actividades y nuestro desempeño en la vida misma al menos durante el primer mes o las primeras semanas.

Sin embargo, como todo suceso difícil en nuestra vida, es importante llevar con serenidad el nuevo proceso de adaptación, es indispensable entender que la vida debe seguir, y que como seres humanos nacimos para vivir diferentes situaciones complejas y dolorosas. Así pues, al pensar en los días después de la ruptura debemos entender que necesitamos hacer el duelo, aceptar que esa persona que antes ocupaba un lugar ya no está y seguramente no volverá.

 

De este modo, en cualquier situación de ruptura, es importante entender que no están establecidos los tiempos para olvidar, que es un proceso que para alguno de los dos puede resultar más doloroso o más fácil de afrontar teniendo en la cuenta que cada persona es distinta, también es indispensable entender que si la otra persona no desea estar con nosotros, no somos quienes para obligarlos u ofrecer presión por su cariño.

En ese orden de ideas, al tener claro que la decisión ya es definitiva, debemos empezar a encaminar nuestros actos a un cambio de rutina, que nos permita no solo dar vuelta a la página, si no que nos ayude a aprender de esta situación y sea la oportunidad perfecta para crecer como personas y no estancarnos en la tristeza y la depresión.

¿Cómo afrontar una ruptura con serenidad?

A continuación te mencionaremos algunas cosas que debes hacer para afrontar una ruptura con serenidad y madurez.

  • Retoma aquellas actividades que habías dejado a un lado: a veces cuando estamos en una relación dejamos de un lado algunos hábitos o actividades por dedicar tiempo a nuestra pareja, retomar estas actividades luego de la ruptura te hará ver que un poco de tiempo para nosotros mismo no cae nada mal, además te hará distraer la mente y te ayudará a direccionar tu vida más hacia lo que te gusta.
  • Mantén tu mente ocupada y proyectada siempre hacia tus metas y tus sueños: en ocasiones cuando estamos en una relación nos hacemos falsa expectativas, o nos ideamos una vida entera al lado de nuestra pareja, esto hace que al momento de terminar quedemos de alguno modo en ceros, desorientados y desenfocados, así pues al dar fin a esa relación lo mejor que puedes hacer es retomar tus planes, pensando en tus metas y tu crecimiento personal, lo que quieres para tu vida y lo que deseas proyectar la mundo.
  • No intentes reemplazar el vacío con otra persona o con alcohol: un error común al terminar una relación es creer que ese vacío lo podemos llenar con otra persona o con el alcohol, nos enfocamos a fingir que nada está pasando y que la vida sigue su rumbo normal, sin embargo es un grave error tener este comportamiento, debido a que al intentar sustituir lo que sentimos con falsas emociones, estamos es postergando esos sentimientos que con el tiempo puede terminar convirtiéndose en odio o dolor o podemos terminar en relaciones infelices en las que no nos sintamos completos.
  • Distrae tu mente con tus amigos o tu familia: una buena manera de canalizar esas emociones de tristeza y soledad, es rodeándote de personas que te aman y que están ahí para apoyarte, escucharte y darte un consejo, veras como de estas situaciones resultan las mejores amistades o se afianzan más los vínculos con nuestra familia.